El futuro de la Feria de Muestras de Grado no está nada claro. La concejalía de Ferias y Mercados tiene dudas sobre la celebración este año de un evento comercial que cumplió en 2008 su décima edición, por lo que hace números en un último intento de que la iniciativa salga adelante.
Se trata de una cuestión de presupuestos y de equilibrio entre gastos e ingresos. La feria, organizada por un consorcio formado por el Ayuntamiento, la Asociación de Comerciantes Siempre Grado, el Principado de Asturias, la Cámara de Comercio de Oviedo y Cajastur, implica una fuerte inversión municipal. «La decisión aún no está tomada; de celebrarse la feria sería, como el año pasado, coincidiendo con la Semana Santa, el fin de semana del 10 al 12 de abril. Existen unos problemas financieros que se están intentado resolver. Estamos en una época de crisis económica y no sería coherente incurrir en un despilfarro de recursos», explica Ámbar Álvarez, concejala de Ferias y Mercados. Lo cierto es que, de momento y a falta de dos meses escasos de la fecha dada por la edil, no hay ningún movimiento en la organización de la que sería la XI Feria de Muestras de Grado, algo que no es lo habitual. El temor está en la calle y son muchos los moscones que dan por sentado que este año se quedarán sin feria.
A pesar de que la Asociación de Comerciantes y Empresarios Siempre Grado forma parte del consorcio de la Feria, en los últimos años la presencia del comercio local en este evento era mínima. «Me da mucha pena que el comercio local no quiera o no pueda participar cuando en teoría se trata de una iniciativa que pretende ser un escaparate del municipio», lamenta la concejala de Ferias y Mercados.
El presidente de Siempre Grado, Amalio Guisasola, tiene su propia versión sobre la cuestión. «En Grado, se apostó por una feria moderna, de calidad con unos equipamientos punteros, en cuanto a mobiliario y montaje, pero que generaban unos costes elevados. El problema de la feria es de dinero, no de visitantes ni de expositores. En cuanto al comercio local, no acude a la feria porque se trata, en su mayoría, de establecimientos pequeños y familiares que no pueden atender el negocio e ir a la feria simultáneamente», comenta Guisasola.
El comerciante espera que finalmente haya una solución y que la feria pueda tener continuidad: «A nosotros no se nos ha informado todavía de qué va a pasar con el certamen, pero desde Siempre Grado intentaremos que salga adelante, aunque sea con un presupuesto más modesto, ya que repercute positivamente en Grado. Sus más de 20.000 visitantes son un gancho para atraer a público a la villa», concluye el presidente de Siempre Grado.
El calendario de ferias y fiestas de Grado tiene en vilo a los moscones, ya que a los problemas de la feria se suma el momento de incertidumbre por el que pasa la festividad de Santa Ana, organizada por la Hermandad de Santiago y Santa Ana, que sigue sin presidente. «Estamos intentando buscar a una persona que pueda asumir este cargo para que los moscones puedan disfrutar de una fiesta tan emblemática», explica Antonio Rey, alcalde de Grado.